Otra lamentable derrota y varios ciclos totalmente cumplidos
Con pocos jugadores salvándose del aplazo, Newell’s volvió a dejar una lamentable imagen frente a su gente y perdió 1 a 0 contra Defensa y Justicia, profundizando el mal momento de un club que desde su conducción se encuentra sin rumbo y a la deriva.
- Deportes
- Por Santiago A. Fraga
- Feb 12, 2025
![Otra lamentable derrota y varios ciclos totalmente cumplidos](Redaccion.us-east-2.elasticbeanstalk.com/wp-content/uploads/2025/02/nob-dyj-2.jpg)
Si Newell’s se estaba jugando un crédito en este partido, los primeros en no enterarse fueron la gran mayoría de los jugadores. Este miércoles, el equipo concretó uno de los partidos más faltos de ideas y -principalmente- de actitud del ciclo Soso y perdió como local 1 a 0 contra Defensa y Justicia, profundizando hasta el piso su mala imagen a menos de 96 horas para una nueva edición del Clásico rosarino.
Con un primer tiempo totalmente olvidable y sin entrega, la ‘Lepra’ levantó un poco su cara en el segundo con los buenos ingresos de Éver Banega y de Carlos González y la apatía del ‘Halcón’ por atacar, pero la mala fortuna de un gol milimétricamente anulado fue suficiente para que volviera a derrumbarse todo como un castillo de naipes.
Solo los recién mencionados, Tomás Jacob, Saúl Salcedo y Keylor Navas (y algo de Luca Regiardo) se salvaron del aplazo, jugando con algo de firmeza en un equipo sin rumbo y totalmente a la deriva: desde su presidencia y el cuerpo técnico hasta el último futbolista de recambio.
Para este encuentro, Mariano Soso se vio obligado a romper con la línea de tres que no le había dado frutos en ningún partido (solo con Aldosivi, que no atacó por las bandas) para jugar con cuatro defensores abajo. Sin embargo, el equipo volvió a marcar mal y nuevamente aparecieron espacios por todo el frente de ataque, que especialmente supo encontrar Aaron Molinas pero de los que más provecho sacó Gastón Togni.
En ataque, Newell’s padeció la floja conducción de un desabrido y rotundamente apático Gonzalo Maroni, sumado a la inexperiencia y nula presencia en cancha del juvenil Joaquín Plaza y a un muy mal partido de Mateo Silvetti (el peor de la joven joya leprosa).
Con esta combinación, en la primera parte el rojinegro se salvó solamente por dos buenas intervenciones de Navas, mientras que tuvo dos chances con un cabezazo de Martín Luciano y otro de Plaza, pero ninguno pudo convertirse en ventaja.
El ingreso de Banega en el complemento no solo le aportó a la ‘Lepra’ la presencia de su único jugador en cancha con panorama y con virtudes técnicas con la pelota, sino que su ubicación en reemplazo de Maroni (más parecido a lo que jugó siempre) sirvió para que el rojinegro tuviera una verdadera llave de juego en la ofensiva. Incluso, también pudo presionar a Kevin Gutiérrez, de los principales organizadores del juego de Defensa y Justicia, anulando así una de las vías más importantes que tenía el rival.
Sumado a esto, Defensa comenzó a replegarse más, temeroso por irse con las manos vacías y expectante a su vez por un contraataque que le permitiera volver a encontrar los espacios que había perdido.
En ese contexto, el ingreso de ‘Charli’ González sin dudas deben de haber sido los minutos de mayor ilusión de los hinchas rojinegros en mucho tiempo. Con la pesada 32 en la espalda, a segundos de haber entrado, la primera pelota que tocó ‘Cocoliso’ fue una estupenda mediavuelta que se clavó casi en el ángulo de Enrique Bologna, desatando la euforia suya y de todo el Coloso del Parque.
Sin embargo, un offside milimétrico, en una posición en la que el jugador no saca ventaja, terminó siendo motivo para que el árbitro Pablo Dóvalo anulara el gol a instancias del VAR.
Ese golpe anímico terminó siendo durísimo para Newell’s, que si bien siguió intentando con un Banega muy buen distribuidor de juego y con un González afilado (su siguiente jugada sería un doble caño) comenzó a desinflarse y empezó a dejar esos huecos que Defensa estaba esperando con cuchillo y tenedor.
Y así, sobre el final, en una jugada que empieza con una chance de riesgo leprosa en donde ‘Cocoliso’ no puede controlar y perfilarse bien en el área rival, el equipo de Florencio Varela encontró su tan ansiado contraataque agarrando mal parado al rojinegro, y tras un centro raramente bueno de Francisco González sería Juan Miritello quien definiera con una volea al ángulo para darle el triunfo a Defensa y Justicia y hacer estallar la bronca y el hartazgo de la hinchada, con insultos al presidente Ignacio Astore, al cuerpo técnico y a los futbolistas y un único pedido: ganar la próxima fecha.
Si bien la ‘Lepra’ lo pudo ganar, la derrota le termina haciendo justicia al pésimo momento que atraviesa el equipo rojinegro, reflejado incluso en la feroz y sinsentido represión policial que sufrieron sus hinchas a la salida del estadio.
El clásico seguramente será determinante para el futuro de muchos de los protagonistas del club, pero no debería serlo: esos mismos ya tienen su crédito totalmente agotado, independientemente del resultado del domingo.