El presidente Bashar Assad logró refugiarse en Moscú, Israel celebró su caída y realizó ataques aéreos contra “sitios sospechosos”. Aliados de Turquía tomaron una ciudad de la zona norte de Siria mientras los insurgentes subrayaron que las mujeres podrán vestirse como quieran.
Mientras el Ejército sirio informaba su retiro del lugar después que los rebeldes rompieran sus defensas, los insurgentes ya piensan en tomar la ciudad de Homs, la tercera del país, para quedar a las puertas de la capital Damasco, sede del poder del presidente Bashar Assad.
La republicana Barbara Lee dijo que «el Congreso, no el Presidente, tiene el poder de autorizar una acción militar».
