El animal apareció tras la subida del nivel del agua del Río de La Plata. Se desorientó y apareció en el caudal de agua a la altura de la calle 4 y 514, a unos 9 kilómetros del río.
El ejemplar fue visto por un grupo de turistas que caminaban por las playas de Punta Rasa, uno de los lugares del Partido de la Costa más buscados por los pescadores de tiburones.
Los cinco animales habían ingresado al delta del río Paraná y se estima que los motivos que los llevaron a perderse de su hábitat pudieron estar relacionados con eventos climáticos o por la baja oferta de alimentos en aguas saladas.
Fue en un campo de la provincia de Buenos Aires a 700 metros del Río de la Plata, en un campo del partido bonaerense de Punta Indio.
