Una tormenta invernal azota Florida y otros estados del sur de Estados Unidos provocando nevadas en niveles que millones de habitantes no habían visto nunca antes, que solo se ve “una vez en la vida”.
El espectáculo, desarrollado en el parque Lake Eola en Florida, padeció una serie de desperfectos técnicos que lesionaron a varias personas, entre ellas un niño que se encuentra en estado crítico tras ser impactado por un dron.
El presidente electo norteamericano también recalcó que en su Gobierno van “a trabajar en Medio Oriente” con el mismo objetivo.
La Policía arrestó a un menor de 17 años como único sospechoso del hecho. Había miles de personas disfrazadas celebrando cuando se desató la balacera por motivos que aún se desconocen.
En ese Estado norteamericano el fenómeno arrasó acompañado por lluvias torrenciales y fuertes ráfagas de viento. Más de 2,6 millones de domicilios quedaron sin electricidad mientras que las lluvias triplicaron la media de precipitaciones en la región.
