En este marco, las autoridades dictaron nuevas órdenes para que los habitantes dejen sus hogares, a la vez que declararon la emergencia de salud pública.
Los focos más activos se encuentran en Cerro Colorado, Laguna Quetro y Los Manzanos, mientras que en las zonas previamente quemadas de Cerro Colorado y Cerro Bastión, en las márgenes del lago Martín, se observa actividad aislada.
Ante la magnitud del fuego, se involucraron más de 60 brigadistas, técnicos, Gendarmería, Ejército, Prefectura y bomberos voluntarios. Además, dos helicópteros Bell, dos aviones hidrantes AT-802 y un Boeing 737 protagonizaron la descarga de agua en la zona más conflictiva, a la cual resultó imposible acceder a pie por su vegetación.
El Gobierno Nacional informó, a través de un comunicado, sobre la llegada de un camión comando del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), con siete combatientes y técnicos, junto a un coordinador, 16 brigadistas de la Brigada Nacional NEA, dos helicópteros y un avión hidrante AT 802.
Las autoridades advierten sobre el riesgo de nuevos siniestros por la falta de lluvias y vientos fuertes. Al respecto, se produjeron 10 detenciones relacionadas con los hechos, incluidos los focos en el Champaquí, La Calera y Valle Hermoso.
