Marítimos cuestionan al Gobierno por la regulación sobre las obras sociales

El Secretario General del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, Capitán Mariano Moreno, expresó duras críticas hacia la política del Gobierno respecto a las obras sociales, advirtiendo que las medidas adoptadas están perjudicando gravemente el sistema de salud de los trabajadores. En ese marco, el dirigente gremial calificó como «mentirosa» la afirmación oficial de que “las obras sociales son un negocio”, defendiendo el derecho de los trabajadores.

Moreno señaló que «el 31 de enero de este año, la Superintendencia de Servicios de Salud emitió la resolución 01/25, que dispone que todos los afiliados a una obra social que además tuviesen la cobertura de una prepaga, automáticamente pasaban a la prepaga. Y anunciaron que gracias a esa determinación se terminaba con un negocio de 30 años».

En ese sentido, Moreno desmintió la versión oficialista: «Primero y principal, las obras sociales y las prepagas no somos una asociación ilícita. Esto es un convenio que está regulado por el Estado, la Superintendencia, y en el cual tenemos entre tres y cinco auditorías anuales. Acá no hay ningún negocio».

También, denunció que estas medidas buscan debilitar las instituciones solidarias para beneficiar a empresas privadas: «Lo que hace esto, una vez más, es mostrar la intención del Gobierno de debilitar aquellas instituciones que tienen un carácter solidario y colectivo, y trasvasar los recursos a las sociedades anónimas e individualistas«.

En esa línea, advirtió que el Gobierno no busca mejorar el sistema, sino directamente eliminarlo: «Se pueden hacer correcciones, por supuesto. Nunca nos vamos a negar a las correcciones porque cambia la tecnología, cambian los tiempos, cambia la medicina. Pero lo que este Gobierno entiende por modificaciones o revisiones, lo transforma en destrucción. No reacomodan las cosas, no las mejoran, sino que las destruyen».

Moreno también vinculó estas medidas con un ataque directo al movimiento obrero organizado: «A la larga, esto termina siendo un golpe también al movimiento obrero, que hoy por hoy, más allá de las deficiencias que podemos tener en algunos casos, sigue siendo la única pata capaz de pararse ante este Gobierno ante el avasallamiento que pretende«.

Finalmente, el dirigente sindical enfatizó que el sistema de obras sociales se sostiene con los aportes de los trabajadores y las empresas, sin financiamiento estatal: «El aporte que hacen los trabajadores, un 3%, y el 6% de la contribución que hacen las empresas, son los recursos con los que se sostiene este sistema».

Agregó «el Estado no pone un peso. Es más, de esos fondos, un 15% lo maneja la Superintendencia de forma discrecional a través del Fondo Solidario, que se ha creado para que las obras sociales recuperen parte de aquellos tratamientos de alto costo, medicación de alto costo y discapacidad. Y desde que asumió este Gobierno, no ha transferido un solo peso de ese dinero, que es de los trabajadores, no del Estado, y que no es un negocio», concluyó Mariano Moreno.